Se valiente: Vive.

viernes, diciembre 22, 2006

Vivencias alcoholizadas


Hace un rato he hablado con la Alcaldesa y se ha reído de mi voz resacosa. No prometo coherencia de escritura.

Ayer fui de cena de clase y lo que no se es como estoy ahora escribiendo por aquí. Puede que me ralle más que nunca, porque a mi me dura la cogorza mental hasta el día después (no tanto como en el apogeo de la noche, pero algo queda). Creo que le llaman resaca, como he dicho antes. La mía hace que siga igual de suelta con la lengua. Así que... vamos a ver si no me tengo que frenar a la hora de escribir.

Pues en la noche de ayer descubrí que, entre otras cosas, hay mucha gente interesante con la que no había hablado más allá de lo académico. El alcohol ayuda en todo esto, puede ser, no digo que no, pero eh, que me acuerdo de todo (o eso creo) y algunas conversaciones puede que se prolonguen a la vuelta de vacaciones navideñas. Por lo menos a mí me gustaría.

Llegamos tarde a la cena, porque no había sitio para aparcar. Imaginad el local hasta los topes y sabréis la respuesta. Exacto. Todo dios está sentado ya y les sirven antes, por lo que a nosotros para hacer tiempo nos sacan la bebida. :::Modo villancico on::: Y bebemos, y bebemos, y bebemos, y volvemos a beber :::Modo villancico off::: Cuando sacaron las tapas y lo demás ya iba todo el mundo... feliz. Y con el estómago vacío imagina como subiría aquello. Pues eso, que salió la cara más agradable de cada persona. Más de una/o se sinceraba y/o se soltaba la melena, incluso teniendo pareja, y la gente alucinaba. Yo estuve a punto de hacerlo (sincerarme). Hubo un momento que tenía a diez personas alrededor intentando sonsacar, pero no lo consiguieron. “¿Pero va de amor?”, “¿Estás enamorada?”, “¿Te gusta Charlie?”. Ay mentes ingenuas. El bueno de Charlie sólo (sólo) parece que se ha enterado de que va la cosa. Que majo es el chaval, en serio. Me ayudó a no decir nada de lo que luego me arrepienta. Sus palabras fueron “No se si hablamos de lo mismo, eso me lo tendrás que decir tú. No voy a obligarte a que digas nada, y que estas no lo hagan tampoco. Si es lo que yo pienso, ahora no hables. Tienes que hacerlo cuando estés en tus cabales y estés preparada.” Lo que yo decía, a parte de que me acuerdo de todo, que el chaval es super majo. Ah, y espera, porque en medio del botellón hablando de todo y de nada, de las amistades que otro chico (no Charlie) tenía y tal, me dijo que si quería me podía presentar a alguien. Este, a parte de querer ligar con mi amiga, también me cayó bien ^^.Otro que parece que se entera. Si es que... Ah, y también merece su mención la delegada de clase. Una mujer de 42 años que es como nuestra madre (en todos los sentidos) y que vino por primera vez a una cena de clase. Me dijo que cuando quisiera hablar que ella estaría ahí. “Y que sepáis que si me lo dice, de mi boca no saldrá nada” les decía a las sonsacadoras. Madre mía que buena gente que hay, por favor.

Sólo una cosa más. Tengo dos DNI de unas chicas de clase. Ey, si se desperdigan y no hacen nada por no desperdigarse, pues a una a ciertas horas ya le entra frío y tal (bajón), y se quiere ir. Y más teniendo a otra que se estaba durmiendo sentada en la acera. Es decir, yo aún iba bien y todo. Así que nada, llegué a mi casa a la hora que mis padres se levantaban, con dos DNI de sobra.

PD: Que foto más buena ^^


1 Comments:

Blogger Joao said...

Las cenas de clase son lo peor (para la resaca, digo) lo increible es cuando empiezas a ver el putiferio que se crea y que la gente empieza a liarse con unos y otros. Ya ni me acuerdo de esa época. en fin, no sé si nos veremos, por si acaso FELIZ NAVIDAD

1:23 p. m.

 

Publicar un comentario

<< Home