¿Qué hago con mis cartas?

Pasado el freakismo anterior y, dicho sea de paso, el examen de hoy, vamos al tema. Perdonad. Ayer estaba con la tensión del estudio y la mala leche del capítulo y me desquité un poco.

¿Os acordáis de ese café que aún debía? Pues lo sigo debiendo. El tiempo pasa y la cosa se enfría. La cosa es que le llamé antes del puente pasado para quedar. Me dijo que era el cumpleaños de su hermano y que no podía. Hasta ahí bien. Lo que me dejó sospechosa fue la voz. No se si definirla como triste, pero diferente si que era. Quedamos en llamarnos (otra vez) durante esta semana. Y... bueno, no quiero parecer pesada. Fui yo la que llamé la última vez, asi que estoy pensando si estarme quieta y esperar a ver si llama (y demuestra interés, ya que no pudo el otro día) o llamar yo otra vez y de paso preguntar si va todo bien. Mi intuición me dice que algo le pasa, o también puede que estuviera sobando la siesta ^^, pero no se, me quedé inquieta...

Como le dije a la Alcaldesa en una tarde de confidencias ^^, creo que lo que me pasa es que ya tengo el carné teórico, y que tengo ganas de empezar con el práctico. No estoy hablando de coches...

Por cierto, esta semana he ido en coche a la universidad. Buff, no veas lo que sienta de bien dormir un rato más y no depender ni de autobus, ni de tren.

EDITO, EDITO: Me acaba de llegar a casa mi flamante carné de conducir (esta vez sí). Ya me puedo deshacer del cartón ese provisional. Ale, a la marcha :)