Pretendo hablarte
Aquí estoy. Otro día más, otra semana más.
Si te lo preguntas, sí pero no. Sí salí el juves, sí fui al pub, sí me lo pasé bien, pero no nos vimos.
Por infinita vez voy a hablar de mi gilipollez. Sí, esa que aparece cuando no tiene que aparecer, esa que me hace querer llamarle cuando tendría que pasar... Esa que cuando pasa entonces voy yo y no puedo soportar que lo haga.
El sábado, cuando había un montón de gente, cuando podía pasar sin ser vista, es la Ley de Murphy, la gente se dispersa y nuestros ojos se miran. Entonces ya no podía hacer como que no nos habíamos visto, no iba a huir, la cobarde no soy yo. Pues ya está, ante situaciones absurdas, soluciones absurdas.
Desafiada: Hola... -dije haciendo un gesto con la mano y andando a la vez, sin intención de parar.
Flashdance: Hola - me dijo sin sorpresa porque ya me había visto y un minuto antes me estaba mirando mientras yo hablaba por móvil- Espera un momento...
Desafiada: ... -me acerco- Dime.
Flashdance: Nada, que sólo quería saber como estabas... -sonrisa tímida, afectada.
Tensión en el momento.
Desafiada: Bien... Aquí, a ver si encuentro un peluche de Nemo.
Nos reímos. Fin de la tensión. Para qué dar explicaciones y decirle que no estoy bien, que es lo contrario. Así que nada, conversación de unos segundos, me dice que le gusta mi sudadera, hacemos coña de dónde me la he comprado, y fin del asunto.
Podría haberle preguntado qué le pasaba. Es más, si tuviera picardía se lo hubiera dicho. Pero mira, es lo que les dije a los Futuros Doctores, espectadores del momento, que si Flashdance pasara de mí nos habríamos saludado a distancia, sin parar, con un "Hola" y ya está. Pero no. Me hizo parar, me preguntó como me iba.
Eh, joder, ¿para qué? ¿Para qué alargarlo más? ¿Para qué otra semana más cubierta? ¿Para qué hacer eso si no se atreve a hablar como tendríamos que haberlo hecho hace tiempo? Para nada.
Antes pensaba que esto se iba a distanciar, que sin remedio se había acabado todo y con el tiempo sí que pasaríamos mutuamente. Ahora no lo sé. La historia se enfría, es verdad, pero no tengo tan claro que no me envié nada o me llame de vez en cuando al haberle mirado a los ojos después de una semana sin hacerlo. Es más, pensaba que me diría algo el sábado por la noche o el domingo, pero no lo ha hecho.
No sé. Esto siempre me ha superado y ahora también. Parezco una drogaticta, igual me dan bajones que no veas, que me río yo sola.
En fin, me voy a estudiar.
PD: Para la próxima entrada ya estoy preparando algo más alegre. Corramos un (es)túpido velo y dejemos este tema por unos días.
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